lunes, 19 de septiembre de 2011

vamos los redondos...

A ver, Lou no sabe cómo contar esta historia porque es terrible, desde cualquier óptica. 
La historia empieza cuando Lou se tuvo que reunir para hacer un trabajo en grupo para la facultad. Todas gentes desconocidas, nuevas por el momento, ni amigos ni nada. En búsqueda de la confianza. Empezaron a trabajar y decidieron que sería más relajante hacerlo con un poco de música... Ponen la radio, la cambian de a momentos pero siempre queda encendida. Cuando de repente los inunda una canción de los Redondos, la de la solitaria vaca para ser más precisos y nada... Hasta que lo menos esperado sucede. Uno de los integrantes del grupo le cuenta a Lou y al resto que el tenía un amigo que fue a ver a los Redondos y se murió. Así de simple sin anestesia. De un tirón, se zambulló sin probar el agua antes y bueno la reacción que tuvo no creo que haya sido la esperada. Está bien, voy a dejar los rodeos y contar que el resto del grupo se tentó. Nada que ver con nada y así tan tan trágico que no pudieron más que reír. Tratando de que no fuera muy obvio, tratando de mostrar tacto (¿vieron Misión Imposible?). Tratando de mostrar interés: ¿y de qué murió? Bueno, le daba un poco a las drogas...(te traduzco, puede que haya muerto de sobredosis porque era bastante drogadicto) Ahhh... (como si fuera normal) ¿cuándo pasó? al menos los pudo ver antes de morir, ya que eran sus ídolos... No, al final no llegó, murió antes... (cuando uno cree que la historia no se puede volver más triste) ¿hace mucho que pasó esto? Dos semanas, ponéle... ¿Pero, era amigo de verdad o conocido? De verdad... Cada respuesta que recibían los acercaba más a la cruda realidad: vos no sos normal.


Lou no está orgullosa de su reacción y pide disculpas, pero por el otro lado piensa, he had it coming, he had it coming,  he only had himself to blame...

No hay comentarios:

Publicar un comentario